Pico-Hydro es un ambicioso proyecto de Sam Redfield para desarrollar pequeñas hidroeléctricas de 1 Kw a bajo precio. Desarrolla un pequeño sistema hidroeléctrico ubicado en un balde de 5 galones. Se usa un alternador de imanes permanentes como el generador para el sistema, este está compuesto casi enteramente de PVC.
Se realizaron pruebas de campo en la pequeña comunidad de La Florida para determinar las posibilidades que tenía la generación de energía con este dispositivo. La Florida ha perdido su principal fuente de electricidad y dependía de las velas y baterías para sus necesidades energéticas.
La Florida es una pequeña comunidad en torno a una plantación de café en el que a un grupo de campesinos sin tierra, se les cedió una propiedad abandonada después de que los anteriores propietarios fueran a la ruina. Ahora funciona como una comunidad que produce café orgánico excelente. Situado en las faldas de un volcán semiactivo, cerca de la costa del Pacífico, en las tierras bajas tropicales del occidente de Guatemala, La Florida ofrece un clima templado, con fácil acceso al agua. El trabajo en La Florida se centró en torno a la posibilidad de cargar los teléfonos móviles con el sistema Pico-Hydro que se había desarrollado en Estados Unidos.
Para cargar teléfonos móviles, los miembros de la comunidad tenían que coger un taxi y esperar una hora para que cargase en destino. Los teléfonos móviles son cada vez más importantes en pequeñas comunidades aisladas, ya que les dan el acceso a la medicina, el mercado y la familia. Las pruebas de campo se iniciaron mediante la identificación de un sitio con acceso a agua en abundancia y una pendiente pronunciada para alimentar el generador. Después de encontrar el sitio, se montó el dispositivo.
El generador fue instalado con una batería autoreguladora de voltaje, y un inversor. El regulador asegura que la batería no se sobrecarge, la batería almacena la energía para su uso y el inversor convierte la energía a 110 voltios. Después reunieron los teléfonos móviles de la comunidad. En torno a 18 teléfonos. El generador estaba produciendo 60 watts, no mucha energía, pero si suficiente para cargar 10 teléfonos móviles a la vez sin agotar la batería. El sistema produce suficiente energía para cargar todos los teléfonos móviles de la comunidad.
Otra de las aplicaciones que se estan investigando para el generador es la iluminación del hogar. Con el alto rendimiento de los LED es una posibilidad que está a nuestro alcance.
El trabajo continúa. Uno de los problemas a los que se enfrentan es el costo del sistema. El alternador que genera la electricidad en el sistema cuesta unos 300,00 dólares tiene que ser importado de los Estados Unidos. Como parte del programa AIDG en Guatemala, se investiga la posibilidad de la reconstrucción de un alternador de Toyota para funcionar como un alternador en la hidroeléctrica. Después de investigar varias posibilidades, hay un prototipo de trabajo, que se está integrando en el sistema. Otras mejoras incluyen la integración del regulador de voltaje en el dispositivo y mejoras en el rendimiento de la turbina.
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